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Quiere llamar especialmente la atención sobre los vertidos de azufre y otro tipo de polvos, que han provocado la preocupación de numerosos vecinos con mascotas.
El Gobierno municipal recuerda que las ordenanzas municipales de Medio Ambiente, Espacios Públicos y Convivencia prohíben el vertido en la vía pública de cualquier tipo de residuo, y quiere llamar especialmente la atención sobre los vertidos de azufre y otro tipo de polvos, que han provocado la preocupación de numerosos vecinos con mascotas.
El artículo 37.2.a. de la Ordenanza de Convivencia prohíbe : "Arrojar a la vía pública cualquier tipo de basura o residuo. La evacuación de los residuos urbanos se efectuará de conformidad con la normativa vigente en la materia. Los pequeños residuos generados durante el uso normal de los espacios públicos deberán depositarse en las papeleras dispuestas al efecto".
Tras las últimas preocupaciones vecinales sobre el supuesto vertido de polvos
blancos en algunos puntos de San Sebastián de los Reyes, los servicios de Salud
Pública han revisado exhaustivamente la cuestión, desde una perspectiva
sanitaria, ambiental y normativa.
El azufre y otros repelentes, que parece ser que están utilizando algunos
comercios y tiendas a pie de calle para evitar el orín de perros, se encuentra
incluido en el Reglamento 1907/2006 REACH que, dentro de la Unión Europea,
cubre el registro, la valoración, la autorización y la restricción de productos
químicos. La Agencia Europea de Sustancias Químicas (ECHA) lo identifica con
los códigos EC 231-722-6 y CAS 7704-34-9.
Pese a que el azufre no se incluye entre las sustancias sometidas a restricción
de uso, ni se considera que sea persistente, bioacumulable ni tóxico, sí se
considera irritante para la piel, por lo que el Gobierno de Sanse conmina a
aquellos comercios y establecimientos públicos que hayan utilizado azufre u
otros vertidos como repelente de las mascotas domésticas y su orín a limpiar
este vertido de inmediato, so pena de ser sancionados en base a la ordenanza de
Convivencia.
El Gobierno también quiere apelar a la responsabilidad de los propietarios de
las mascotas, a los que recuerda que la sanción por no recoger sus excrementos
puede oscilar entre los 60 y los 750 euros.